jueves, 22 de mayo de 2014

CAPITULO FIN: THE END

Silvia no sabe qué hacer, no quiere marcharse sin tener confirmación de que la empresa va a retirar los cargos, no quiere volver a ver a Luke si no poder darle buenas noticias…
Se queda mirando al Sr McCarthy, está a punto de llorar otra vez…
- Silvia, quédate aquí si quieres tómate una manzanilla y vamos a ver si nos dicen algo pronto.
- De acuerdo, no me veo capaz de volver a ver a Luke y no poder decirle que todo saldrá bien…
Silvia se sienta mientras la asistenta le trae una taza de  manzanilla. Pasan los minutos, muy lentamente, el tiempo parece detenido en esa incertidumbre de no saber. Es muy grave que Luke entrara como un ladrón en el centro comercial, pero no hizo nada más que buscar cintas, no hizo nada más, ya les han castigado severamente con la decisión de nunca más ser contratados por una empresa del grupo, ¿qué van a ganar amargándole la vida a un joven que siempre ha dado lo mejor de sí? – va pensando Silvia….

Tras más de 40 minutos de larga espera la puerta del despacho se abre de nuevo.
- Silvia, ya han tomado una decisión al respecto.
Silvia, sobresaltada y muy asustada se pone de pie y se acerca a la puerta del despacho. El sr McCarthy la hace pasar.
- Van a retirar los cargos, entienden que no sirve de nada continuar con esto, pero los de la embajada están al tanto y no sabemos cómo ellos van a actuar ahora.
- Bien, mierda – dice Silvia….
Está muy contenta de que la empresa vaya a retirar los cargos, pero ahora parece que la mecha de la dinamita es cada vez más corta y podría explotar en sus narices en cualquier momento.
- Muchas gracias – dice Silvia.
- No hay de qué. Mantenme informado ¿ok? Si puedo hacer algo más avísame.
- Lo haré, es usted una gran persona – dice Silvia caminando hacia la salida para coger el ascensor e ir a hablar con Luke…

Cuando Silvia llega a comisaría el teniente Smith la está esperando, y a su lado está Luke, libre, con su ropa de calle y sonriente.
- Silvia, nos han notificado que la empresa ha retirado todos los cargos, así que Luke se puede marchar ya. Tenéis que estar localizables por si necesitamos que testifiquéis contra el vigilante o por si surge cualquier cosa.
Silvia está muy feliz de ver a Luke libre, no sabe si debe decirle algo acerca de las “malas noticias” pero lo primero que se le ocurre es darle un abrazo. Un abrazo muy muy fuerte, tiene mucho miedo de lo que pudiera suceder.

Seguidamente el agente Smith le da una mano acompañada de una plamadita en el hombro.
- Silvia, has actuado como una profesional, nos has impresionado, eres muy fuerte y valiente. Luke tiene suerte de tenerte.
- Muchas gracias – dice Silvia – medio avergonzada, sonrojándose al recordar la locura de hace dos días cuando se dejó llevar por los nervios y la tensión y acabo teniendo sexo con el agente…
- Ya os podéis ir – dice el teniente.
- Muchas gracias por el trato de favor – dice Luke, no lo olvidaremos nunca.


Silvia y Luke salen por la puerta abrazados y sonriendo.
- Ah!! Qué bien me sienta ver la luz del sol!!! – dice Luke al que le han parecido una eternidad los tres días de calabozo.
- Sí, que bien que estés fuera, te necesito ahora…. – dice Silvia.
Los dos se miran pícaramente y sonríen. Se aprietan fuerte el uno contra el otro y ponen rumbo al apartamento.

Al llegar a casa no les da tiempo ni a subir las escaleras. Se besan apasionadamente en el rellano, suben hasta el primer piso y allí contra la pared las ganas de entregarse el uno al otro superan las ganas de llegar a casa en el segundo piso…

Luke mete su mano en los pantalones de Silvia mientras la besa y la muerde apasionadamente en el cuello. Ella le tira del pelo como si le quisiera arrancar el cuero cabelludo de cuajo.
Sus lenguas se enredan e invaden sus bocas para recorrer cada milímetro de sus cavidades y apresar sus labios con fuerza y devoción.
Luke abre la blusa de Silvia, le aprieta los pechos, con manos firmes pero sensibles, y baja con sus labios y su lengua hacia los pezones de Silvia que se agarra a la baranda de la escalera fuertemente.
Luke se la quiere comer, le besa los pechos succionando sus pezones y sigue bajando hacia el ombligo. Le abre los pantalones y se los baja hasta las rodillas. Luego le baja las braguitas y la coge fuertemente para sentarla en la escalera. Luke introduce su cabeza entre las piernas de Silvia que están limitadas por el tiro del pantalón. Ella no se puede mover, y Luke empieza a chupar el sexo de Silvia con tanta pasión que ella siente que va a caer.

Luke quiere darle mucho placer a Silvia, y lo está consiguiendo. Ella no puede agarrarse muy bien a ningún sitio, la embiste con demasiada fuerza, casi con fúria, haciéndole sentir como se prepara en su interior un orgasmo inminente. Se agarra con una mano a la baranda y con la otra se agarra a la cabeza de Luke apretándole con su clítoris.
Silvia se corre, su cuerpo se estremece y se sacude a causa de las olas de placer que le llegan una tras otra. Luke no para, mientras él sigue chupando ella intenta pararle pero, el mete sus dedos en ella en busca del punto G en la parte interior de su vagina.

La masajea, ella está delirando de placer, temblando y gimiendo sin parar. Los dedos de Luke parecen expertos, la posición es complicada, pero Silvia está disfrutando como loca. Siente algo nuevo, un placer que no había sentido nunca antes, de nuevo la presión en el clítoris le parece como si un nuevo orgasmo estuviera llegando, pero es distinto, la sensación por dentro y por fuera es como si fuera a hacerse pipi, no aguanta más, no puede más, de repente un gran placer emerge desde dentro, Luke ha estimulado bien su punto G, gran cantidad de líquido blanquecino emerge de la vulva de Silvia de forma inesperada….
Nunca había tenido un orgasmo así.



Luke está contento. La mira mientras ella trata de recomponerse. Silvia respira muy rápido, le cuesta enfocar sus ojos, su cuerpo está como paralizado, pero de repente se oyen pasos en el rellano. Alguien acaba de entrar y va a subir.
Luke la coge en sus brazos y sube la escalera rápidamente para entrar en casa sin ser vistos.
Una vez dentro Silvia empieza a reaccionar.
Luke la besa, se enredan de nuevo y Silvia lanza sus pantalones volando en medio del salón.
Coge a Luke y le empuja contra la pared. Tira su camiseta hacia arriba y se la saca rápidamente. El pecho fuerte y ligeramente velludo de Luke la vuelve loca. Silvia hunde su nariz en su piel para respirar su olor, y luego empieza a lamerle y besarle, a veces delicadamente y a veces con ligeros mordisquitos.
Silvia va bajando para proporcionar a Luke tanto placer como pueda, pero entonces suena el timbre.

Silvia se esconde y Luke abre la puerta quedándose medio tapado por la puerta para ver quién es.
- Correo certificado para Luke Willkins.
Luke lo acepta y firma la recepción de la carta.
Lleva sello de la embajada de Nueva Zelanda. La carta es una notificación conforme Luke, dado sus antecedentes, no puede recibir prorroga de residencia en Estados Unidos. La fecha límite en la que debe abandonar el país es de una semana a partir de hoy mismo.

Silvia no se lo puede creer, él tampoco…. ¿Qué van a hacer ahora?
Se tumban en la cama pensando en opciones, miles de conversaciones, o recursos que podrían presentar, pero no tienen ni idea de si habrá solución….

Silvia no puede imaginarse vivir sin Luke en Los Angeles. Luke no quiere volver a su país pero cree que con tan poco margen de tiempo no lo podrán evitar.
Deben aprovechar los días que les quedan juntos. Después de tanto luchar y tanto disfrutar quizás es el momento de poner un punto final a su aventura. Quizás no estaban predestinados a estar juntos, la distancia será demasiado grande….


Pasan los días. Los dos han aprovechado al máximo el tiempo y han intentado conseguir una prórroga, pero a pesar de que los cargos contra él ya no existen, la maquina burocrática no se para. Luke se debe marchar.

Silvia ha decidido marcharse de Estados unidos también. No tiene sentido quedarse allí ahora. Quedan dos semanas para terminar el master y luego intentará conseguir prácticas en una empresa internacional con oficinas en Nueva Zelanda. Parece una buena idea, pero no sabe si lo podrá conseguir. Parece que el destino ha decidido ponérselo difícil, pero así es la vida, no siempre las cosas salen como a uno le gustarían….

Silvia y Luke se despiden en casa. Hacen el amor toda la noche y luego Luke se marcha silenciosamente sin despertarla dejándole una nota de amor al lado de la almohada.

- I love you my crazy Elf. I will always love you.





FIN

2 comentarios:

  1. Una separación forzosa, pero quizás no definitiva. Seguirás más adelanate con la historia? Eso espero, ha sido divertida e ingeniosa.

    Espero impaciente la nueva historia de Paty

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  2. Gracias, me alegro de que te haya gustado…. La historia de Paty empieza hoy, algo distinto, nada navideño, y con mucho ritmo.

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