martes, 10 de diciembre de 2013

CAPITULO 1: MIS NAVIDADES MAS CALIENTES


CAPITULO 1: MIS NAVIDADES MAS CALIENTES.

Resulta extraño empezar mi historia con un título de entrada contradictorio, pero la verdad es que mi vida ya no es la que era, y mis navidades tampoco. 
¿Navidad-Caliente? Sí, claro, es posible! Déjame que te cuente.

Me llamo Silvia y soy una de tantas españolas jóvenes que se han visto obligadas a emigrar por culpa de la crisis actual y por mi desengaño total en cuanto a la política europea.

Me marché a Estados Unidos hace 4 meses, en concreto a Los Ángeles. He encontrado un máster de medio año que me ofrece la posibilidad de un visado de residencia de 1 año en América. En este tiempo me he propuesto dos cosas:
  • Terminar mi máster con la mejor puntuación posible.
  • Conseguir un trabajo estable que me de la opción de ampliar mi visado a dos años como mínimo.
Mi inglés no es el mejor del mundo pero me defiendo, y por internet he conseguido encontrar un piso compartido con otras dos chicas de mi edad que estudian en el mismo campus. Así que no tengo demasiado miedo, seguro que me las arreglaré.
Mis padres, por otro lado, están muy asustados, mis hermanas también, pero yo les digo que no deben preocuparse, que yo tengo que irme porque quiero vivir, porque quiero sentir que puedo hacer cosas, que hay empresas dónde un joven puede aportar algo sin ser sólo un becario que hace el trabajo de un empleado y luego es substituido automáticamente por otro becario, y así hasta el infinito. Quiero ser una profesional con proyección de futuro y quiero crear algo por mí misma.
No creo que en España la preocupación del gobierno ni la dedicación de los impuestos se enfoquen en generar negocios ni empresas exitosas… odio a los políticos… lo único que hacen es llenarse los bolsillos, ellos y sus familias y marear la pava al máximo para quedarse cuatro años más, y si no se quedan, casi mejor, que siguen cobrando por no hacer nada… ¡¡qué asco!!!
Pero bueno, quiero contar mi historia, y eso es lo que voy a hacer.

A mis 27 años ya he trabajado en un montón de diferentes funciones: recepcionista, camarera, secretaria, traductora, canguro, relaciones publicas, dependienta…. Todo trabajos temporales y mal remunerados pero de los que aprendes siempre algo. Si algo tengo es que consigo ver el lado positivo de las cosas…


Así que decido marcharme, porque en América hay oportunidades (o eso dicen), puedo comunicarme relativamente bien en inglés, hace buen tiempo y las playas están llenas de cuerpos Danone, y si todo sale mal, por lo menos habré mejorado mi inglés. - Al aeropuerto y a cruzar el charco, que si me lo pienso mucho me da la morriña.


Estamos en febrero, y llegué en Octubre. 
De momento no tengo trabajo estable, pero mis notas son buenas, y ….¡¡¡ tengo novio!!!!!
Esto no estaba en el plan, pero estoy muy muy feliz.

Jajajaaj, seguro que queréis saber más ... 
La "emigrante" ya tienen novio, estudia y trabaja en Los Angeles, ¿qué más queréis? Me siento orgullosa de mí misma.

En cuánto llegué me puse las pilas, me enfoqué 100% en mis estudios y en noviembre empecé a buscar trabajo. Mi inglés ya había mejorado, daba un poco más "el pego", y en caso de emergencia el 50% de la población también me entendería en español.
Mi primer trabajo ha sido de camarera. Al lado de mi apartamento hay la típica cafetería americana con batidos, hamburguesas…. Jajajaja… como la cafetería dónde Sandy y Dani van a tomar sus “drinks” en la película de Grease. No me toca llevar uniforme rosa, pero algo parecido, triste tener que llevar uniforme a los 27 años, pero la vida es así. Me pagan en negro, no pueden hacerme un contrato formal, y me avisan de un día a otro si hace falta que venga o no … es decir, trabajo precario, que no me sirve para cumplir mi objetivo.

Mis compañeras de piso son mejicanas de familias ricas, estudian y van de compras, y yo soy la “pringadilla” del grupo …y, aunque me cuidan y nos divertimos juntas en el piso y en el campus, casi nunca puedo ir con ellas a los clubs más “in” , y no porque no quiera, sino porque no los puedo pagar (aunque mi excusa siempre es que tengo que estudiar). Necesito encontrar un trabajo lo antes posible. No puedo seguir así, como si tuviera 16 años para siempre.

Soy una mujer moderna, fuerte y con ganas, y si me propongo algo ... LO CONSIGO!!



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